RÍO. Exposición de Ana Volonté en Escalera Galería

Nadie baja dos veces a las aguas del mismo río.

                          Heráclito el oscuro

Río. 

Muestra de Ana Volonté.

En Escalera Galería.

Texto y Cuidadoría: Alma Estrella

Ph: Roberto Camarra para Rayo Verde

Ph: Roberto Camarra para RayoVerde

 “Río” (tal vez como toda la obra de Ana) es un recorrido, un movimiento continuo, cíclico, que va del entorno al cuerpo, del cuerpo a los oficios, de los oficios al entorno, mezcla todo de nuevo y vuelve a empezar. Sus obras, de formatos diversos como el diseño floral, la repostería y la performance, son registradas en fotografía, audio y video para que podamos seguir su rastro, su estela. El recurso a archivos opera como una verdadera “caja de cosmos” que a fuerza de caprichos, digresiones y titileos, demuestra que trazar una línea de tiempo siempre es más parecido a un montaje maldito que a una cronología. 

Siesta. Río.​ ¿Qué río es éste por el cual corre el Chavascate? ¿Qué río es éste que atraviesa la siesta? ¿Qué siesta, la que corre y suena al calor de una repostería errante? ¿Qué misterio de los tiempos y de las fluencias se eterniza en sus ritmos? Piedra, fuego, glacé, arena, sueños. El entorno como interfaz o como partitura, los soportes múltiples, el cuerpo como soporte. Todo va (viene) y vuelve a la obra renovándola incesantemente, incluso el tiempo. Todo cambia, nada permanece. Así el fuego transforma la materia, la naturaleza es fuego. 

La vía láctea boreal.​ Una banda de luz tenue atraviesa el infinito, o, como en las alegorías chinas y japonesas, un río de plata corre por el cielo. Algo se derrama sobre un pecho: podrían ser flores, leche, estrellas. Una vía láctea de crisantemos, peonias, rosas, musgo, organzas. Todo cambia, nada permanece. 

Gymnastique élementaire.​ La mano florista se vuelve escultora. El cuerpo desnudo (gymnos) señala la belleza de las formas. Y ésta reorganiza curvaturas, simplifica, inventa olimpiadas, diseña músculos ágiles, precisos en sus movimientos. Todo cambia, nada permanece. El cuerpo descubre una fuerza, una cifra andrógina. Una fuerza que une todas las cosas con lazos invisibles. 

Devil´s Cake.​ Recetarios familiares para un mundo nocturno y teatral, de vanitas y bodegones, de penumbra erótica y temporalidades citadinas. El cuerpo se contorsiona, deviene cuerpo-pesadilla, abraza la propia oscuridad y sus ramos. Belleza y sofoco. Chocolate, nardos, cacao, clavelinas, algún follaje rojo. En este espacio, en este tiempo, ya no queda siesta. Río sí. Todo cambia, nada permanece. 

                                     Alma Estrella 

Colegiales, Buenos Aires. 

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"Río" la muestra de Ana Volonté se puede visitar durante todo marzo y todo abril. Consultas para visitar el espacio:escaleragaleriabsas@gmail.com. 

Acerca del concepto de Cuidadoría:

Digo que hago la “cuidadoría” (y no la curaduría) porque no pretendo ser guardiana de la obra, más bien quisiera hacerme amiga, dejarme contagiar por ella, estar ahí cuando llegan los momentos de diseminar sus semillas. No pretendo construir discurso o definir artisticidades, creo que todo lo que me interesa es asumir un riesgo, llegar a ser (en el mejor de los casos) cómplice en el gesto. Toda sensación es una pregunta.

Alma Estrella, Escalera Galería, 18 de marzo de 2017.